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Al inicio de año, muchas personas ponen metas, logros, objetivos, muchas cosas que alcanzar para ser mejores cada día, la mayoría de las personas esperan un nuevo comienzo siempre.
¿Tu que te propusiste hacer? Quizá tener mejores calificaciones en la escuela, crecer en el trabajo o ser una mejor madre o esposa. ¿Pero en alguno de tus propósitos está el buscar a Dios? ¿En crecer en el y buscar su palabra todos los días? Probablemente si, o quizá no.
No se cuales sean tus propósitos para este año, pero déjame animarte a que esos propósitos estén centrados en Cristo. Puedes lograr cualquier cosa si lo que quieres es la voluntad de Dios. No hay magia, no hay misterio, no hay rito, simplemente desear lo que Dios quiere.
¿Pero que es lo que Dios quiere para mí?
1 Tesalonicenses 4:3-8
Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación; que cada uno de vosotros sepa tener su propia esposa en santidad y honor; no en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios; que ninguno agravie ni engañe en nada a su hermano; porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado. Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación. Así que, el que desecha esto, no desecha a hombre, sino a Dios, que también nos dio su Espíritu Santo.
En una palabra: Santificación. Seas mamá y esposa, soltera, viuda. Que seas una mujer de Dios, cumpliendo su palabra en tu vida, honorable, respetada, humilde, sencilla. Una mujer que reconozcan por su mansedumbre, por su amor, por saber perdonar.
Ser Santo, no significan ropas blancas, que te veneren y te pongan en un altar, santo significa ser puro, sin mancha.
Volviendo al tema de las metas y propósitos, puedes ahora guiar lo que estás pensando en que ante todo lo que elijas seas santa, que no te desvíes de Dios, que te acerques mas a Dios y que des testimonio de su nombre.
Recuerda que “Todo lo puedes en Cristo” Pero si es en él, no se refiere a que vas a lograr todo lo que tu quieras, si no todo lo que el quiera para ti, porque si elijes hacer su voluntad lo vas a lograr.
Para apoyarte a centrarte en tu crecimiento espiritual, hicimos un “Plan de objetivos” Lo puedes encontrar aquí, en la sección para ti.
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